domingo, 25 de abril de 2010

TODA NOCHE PUEDE SER CANCIÓN

Una noche común,
Con el silencio ensordecido
disfrazado tras la ventana…
Llegó una canción.

Se postró entre mis manos
que obligaron a levantarme por la guitarra,
Ya juntos los tres, platicamos…

Hablamos del amor y de lo difícil
Que es a veces guardar silencio,
De la nostalgia, la soledad.

Después de algunas horas
Y escuchar el cantar de un gallo citadino,
La noche era una hermosa mañana,
Mis manos discípulas de mis cuerdas de nylon,
Un silencio, notas blancas, negras, semicorcheas
Volando en el aire y regresando una y otra vez
A mis pulmones.

Finalmente la canción se puso de gala
Vestida con palabras de una noche de musa
E interpretada por un cuerpo lleno de voz
Y armonía.


Dedicado con amor y admiración al cantautor Héctor Cantú.

2 comentarios:

  1. Las musas se manifiestan de muchas maneras, perro hace tiempo que he notado que todo fluye mejor con un café, cuando la nostalgia y la melancolía nos acompañan a la mesa y le dan vida a la pluma, a las cuerdas de naylon y cobran vida cuando alguien las interpreta para romper el silencio y perderse en las memorias...

    Pues aquí pasando a invitación del face... vengo apenas dándome el tiempo de leer con calma para poder descubrir lo que se dice, incluso entre líneas, por aquí andmos y vendremos cuando hay alguna novedad...

    Saludos

    ResponderEliminar
  2. Hola Sonia, aceptando tu invitación al blog me he llevado una maravillosa sorpresa, me gustan tus textos, estaré por acá leyendo habitualmente, recibe un abrazo desde Mérida.

    ResponderEliminar